En un desayuno de camaradería realizado en Copiapó, se llevó a cabo la entrega simbólica de la Beca Kinross 2025, instancia que reunió a los nuevos becados y becadas junto a sus familias, docentes y representantes de la compañía minera. La actividad fue una oportunidad para compartir experiencias, sueños y reflexionar sobre el impacto de este apoyo en la trayectoria educativa de los jóvenes.
Este año, cuatro estudiantes se suman a la historia de esta beca que desde hace más de 30 años busca aliviar la carga económica de las familias de Atacama por medio de un aporte monetario, durante toda la duración de los estudios universitarios: Valentina Guzmán Muñoz, estudiante de enfermería y Javiera Astudillo alumna de Obstetricia y Puericultura, ambas de la Universidad de Atacama, Rocío Tapia Barlaro, estudiante de Licenciatura en Física en la Universidad de Chile y Martin Ledezma Cortés, quien cursa Ingeniería Civil Industrial en la Universidad de La Serena.
Patricio Pinto, director de Asuntos Externos de Kinross Chile, destacó que este beneficio apunta a apoyar la educación de los jóvenes de la región, lo que va en línea con los pilares de la compañía. “Capital humano no es solo pensar en un trabajador capacitado, sino también cómo logramos que niños, niñas y jóvenes puedan cumplir sus sueños. Queremos colaborar y contribuir a que haya más profesionales que puedan tener la posibilidad de desarrollarse”.
Valentina Guzmán y Javiera Astudillo, estudiantes de la Universidad de Atacama, coincidieron en que la Beca Kinross representa un apoyo fundamental para enfrentar los costos asociados a sus carreras, las cuales requieren de numerosos materiales. Valentina, quien cursa Enfermería, comentó: “Sin esta beca, me habría sido muy difícil costear los uniformes y los implementos que necesito, así que estoy muy agradecida por esta oportunidad”. Por su parte, Javiera, estudiante de Obstetricia y Puericultura, destacó que el beneficio le permitirá adquirir insumos, materiales y libros esenciales para su formación académica.
En tanto, Rocío Tapia, estudiante de Licenciatura en Ciencias con mención en Física, expresó que ser becada tendrá un efecto significativo a nivel económico para su familia, ya que deben costear diversos gastos como arriendo, locomoción, comida y otros. “Esta beca es un gran apoyo porque de esta manera puedo estar más tranquila en Santiago. Espero que más gente pueda conocer esta beca porque verdaderamente es muy buena para los estudiantes”.
Daniela Cortés, madre del estudiante beneficiado, Martín Ledezma, quien no pudo asistir al evento por encontrarse en periodo de pruebas, dijo sentir un gran orgullo por los logros de su hijo y destacó la importancia de la iniciativa. “Esto es un aporte relevante para los jóvenes que no tienen la oportunidad de estudiar, es muy positivo para su desarrollo académico”.
Por último, Tamara Badilla, subgerenta de Desarrollo Comunitario de Kinross, destacó que “estamos celebrando a cuatro jóvenes talentosos, los cuales a través de su esfuerzo pudieron postular a la beca Kinross, han podido ganársela y con eso va a aportar a su desarrollo profesional y a la región”.
Desde su creación en 1992, la Beca Kinross ha beneficiado a 37 estudiantes de Atacama. Actualmente, 10 jóvenes cursan estudios con este respaldo, incluyendo estudiantes pertenecientes a comunidades indígenas Coyas y del sector de Paipote, áreas de especial interés para la compañía.