Tomando en cuenta los impactos generados por la pandemia en la economía y el empleo, la Cámara Chilena de la Construcción (CChC) ha estado impulsando, a través de su Fundación Social, el programa “Atención a cesantes”, que tiene como objetivo apoyar a trabajadores del sector que se han quedado sin trabajo, a través de orientación y asistencia social, inscripción en bolsas de trabajo, capacitaciones para poder acceder a nuevas oportunidades laborales y un aporte solidario para la alimentación de las familias o para cubrir gastos de primera necesidad.
En el caso de la región de Atacama, ya se han entregado 840 atenciones personalizadas a 385 trabajadores del sector construcción.
Erick Gallardo, trabajador del sector que ha recibido este beneficio en la zona, destacó que “se agradece que hayan estado pendientes de uno, sobre todo las asistentes sociales para ayudar en la orientación para saber cómo optar a distintos programas en el tiempo que estuve sin trabajo, además recibí un aporte en dinero en cuatro ocasiones”.
Cabe destacar, que para la CChC uno de los ejes de su labor está en impulsar beneficios concretos a trabajadores del sector y sus familias, aumentando su inversión en programas sociales -que han sido diseñados en base a las necesidades de los propios beneficiarios- año tras año, iniciativas que este 2020 se han adaptado para ser un aporte concreto en el contexto de la pandemia.
De esta manera, bajo un paragua común denominado “Mi caja de herramientas”, se están impulsando, entre otras iniciativas, el programa Mujer, enfocado en la prevención del cáncer; operativos de salud en obra relacionados con la emergencia sanitaria; la línea telefónica de contención emocional “estamos contigo”; capacitaciones online; derivación de trabajadores con sospecha; o la campaña de PCR masivos.
“Dentro de lo que realizamos como Cámara uno de nuestros ejes es poder ser un real aporte en mejorar el bienestar de los colaboradores de nuestras empresas y sus familias a través de programas sociales, iniciativas que dado el contexto que estamos viviendo, marcado por la pandemia, se vuelven aún más trascendentes para poder generar redes de apoyo a nivel local”, explicó Guillermo Ramírez, presidente de la CChC Copiapó.
El líder gremial complementó lo anterior comentando que “es muy relevante que podamos seguir fortaleciéndonos como región a través de un trabajo colaborativo que incluya a los sectores públicos, privados, académicos y social, para poder afrontar con éxito los desafíos que tenemos por delante, entre los cuales está como una de las prioridades la reactivación del empleo”.
La actividad de la construcción es un sector clave para la economía y el empleo en la región de Atacama, representando el 8% de la fuerza laboral (entre 8 a 10 mil personas históricamente, aunque, según el INE, entre el trimestre junio-agosto de 2019 y el mismo periodo de 2020 ha disminuido en casi 40% la gente que es parte de esta actividad productiva) y 10% del Producto Interno Bruto Regional (PIB), siendo la tercera más incidente después de la minería y servicios financieros. Además, las obras que se ejecuten a nivel local (como proyectos de infraestructura pública o viviendas), tienen directa relación con mejorar la calidad de vida en la zona.